Un día de lluvia se encontraban dos enemigos jurados en su último encuentro o eso creían. L y Kira, el mejor detective del mundo y el asesino más buscado. Ambos intentando penetrar en la máscara del otro, sin embargo, sus sentimientos no estaban de acuerdo con los acatos de su cerebro. Los dos demasiado diferentes por fuera, demasiado parecidos por dentro. Era evidente que algo inesperado iba a pasar.